Haciendo honor a su sobrenombre, con un atuendo el color rojo, Robert trepó el monumental edificio de 613 pies ubicado en el distrito comercial La Defense de la capital francesa.

Según agencias internacionales, Robert señaló la importancia de cumplir tus sueños sin importar la edad que tengas ; “Quiero enviar a la gente el mensaje de que tener 60 años no es nada. Todavía puedes hacer deporte, estar activo, hacer cosas fabulosas”.

Y aunque no es la primera vez que Robert escala este edificio, si es algo simbólico que él se propuso lograr al cumplir los 60 años de edad; “Me prometí hace varios años que cuando llegara a los 60, volvería a subir esa torre porque los 60 simbolizan la edad de jubilación en Francia y pensé que era un buen toque” señaló el escalador.

Robert ha sido nombrado por muchos medios como un superhéroe real, por la habilidad que tiene para escalar grandes edificios, de ahí su apodo “Spiderman francés”.

Su historia en esta actividad comenzó en 1975, al entrenar en los acantilados cercanos a su ciudad natal, Valence, en el sur de Francia. Para 1977 continuó practicando la actividad en solitario y rápidamente se convirtió en un escalador de primera línea.

Robert reconoce que esta escalada también la hizó para concienciar sobre la necesidad de actuar contra el cambio climático.

Entre los más de 150 rascacielos que Robert ha escalado alrededor de todo el mundo, se encuentran; el Burj Khalifa de Dubái, el edificio más alto del mundo, la Torre Eiffel y el puente Golden Gate de San Francisco.

Confiesa que suele subir sin permiso siendo detenido en diversas ocasiones. Además de trepar sin arnés, utilizando sólo sus manos desnudas y un par de zapatos para escalar.