El sacerdote dominicano David Pantaleón, superior de los jesuitas en Cuba que desde el boletín dominical Vida Cristiana exponía la realidad nacional, fue obligado a abandonar el país, según confirmaron fuentes de la iglesia.
“Lamentamos que el gobierno cubano, en uso de sus facultades de poderío dictatorial, sin principios ni valores, le obliga a abandonar el país: temen a la verdad, temen al rostro del bien y quieren deshacerse de lo que les molesta, es su único modo de proceder”, escribió en Facebook la monja Sor Ariagna Brito Rodríguez, de las Hermanas de la Caridad del Cardenal Sancha.
“Esto no debería pasar. Los que deben abandonar el país son los que usan el poder para vivir como reyes, a costa de un pueblo esclavo, castigado, azotado y obligado a huir”, añadió la religiosa.
“Es público que el P. David Pantaleón, expresidente de la CONCUR y Superior de los Jesuitas en Cuba, termina su presencia en la isla, expulsado por el régimen. ¡Gracias, Padre, gracias por ser voz de los que no la tienen!”, escribió también en Facebook Osvaldo Gallardo González.
«Mañana sale de Cuba, no le extendieron el permiso, los últimos tres meses estuvo con visa de turista. Ya se sabía que era expulsado, pero se ha hecho público ahora», precisó Gallardo González en respuesta a una pregunta de la activista Anamely Ramos.
La Ermita de la Caridad de Miami se hizo eco de la noticia en la citada red social, y agradeció al padre Pantaleón su “servicio pastoral y profético en Cuba”.
Pantaleón, sacerdote de la orden Compañía de Jesús y expresidente de la Conferencia Cubana de Religiosas-os (CONCUR), estuvo entre los eclesiásticos que pidieron al régimen llevar ayuda a los activistas del Movimiento San Isidro (MSI) que hicieron huelga de hambre a finales de 2020.
“Una hermana religiosa intentó llegar, sin publicidad y sin cámaras, hasta el grupo de jóvenes de San Isidro que están hace varios días encerrados en su local. Ellos permanecen allí pidiendo la liberación de uno de sus compañeros que consideran apresado injustamente y condenado sin defensa. La monja solo quería dar un poco de asistencia religiosa ante la seria amenaza de muerte de los que llevan varios días en huelga de hambre y sed”, escribió Pantaleón en Facebook tras consumarse la negativa.
“No se trata de ideologías de izquierda o de derecha. Se trata de cosas tan simples como el derecho a vivir, a expresar lo que se piensa, a dialogar las diferencias sin ‘satanizar’ al contrario, a que se respete la dignidad de todos y todas”, agregó el sacerdote en sus declaraciones.
Al cierre de esta nota las autoridades eclesiásticas cubanas no se habían pronunciado sobre la salida de Cuba del cura David Pantaleón.
En los últimos años son varios los sacerdotes que se han buscado la enemistad del gobierno cubano por convertirse en voces críticas de la realidad del país. En ese grupo figuran, entre otros, los clérigos Alberto Reyes y Kenny Fernández y Sor Nadieska Almeida, Superiora de las Hijas de la Caridad en La Habana.
A comienzos de este año la ONG evangélica Open Doors incluyó a Cuba en su ranking anual de los 50 países con mayor persecución y discriminación hacia los cristianos.